Llega un momento en la vida de toda mujer en la que se plantea escribir un libro. ¿Y si escribo un libro? ¿Y si soy capaz de inventarme un mundo fantástico a lo Harry Potter y me convierto en millonaria? Y con una mezcla de emoción y delirio una se va dando caña mental de camino al trabajo y piensa: "esta noche, en cuanto llegue a casa, me pongo con ello". Y de repente te invade una sensación de nervios en la que te imaginas firmando en la contraportada de la décima edición de tu bestseller. Vamos, la misma emoción que sientes el día antes del sorteo de Navidad, cuando empiezas a "gastar" los millones que esta vez seguro, SEGURO te van a tocar ti...
Así, señoras, va pasando otro frenético día de trabajo en el que a medida que las horas van avanzando la idea de escribir un libro parece algo más abstracta que por la mañana. Aún así todavía está ahí y en un momento en el que jefe se pone un poco más pesado de lo habitual, retomas la idea con fuerza y de repente te ves envuelta en una nube de glamour y eligiendo a los protagonistas que darán vida en la "Gran Pantalla" a la adaptación de tu novela mundialmente famosa. "¡Se me ocurrió la trama por casualidad, no sé como ha tenido tanto éxito, estoy encantada! Además bebo 2 litros de agua al día e intento dormir 8 horas diarías". Esto último nadie te lo pregunta en tu entrevista imaginaria, pero lo cierto es que yo siempre he querido decir que para estar tan estupenda es lo único que hago, bueno eso y "ser feliz"... ¿No es lo que contestan todas las tops cuándo les preguntan por lo mismo?
Total, que en el atasco de vuelta a casa, tras 10 horas intensas de trabajo, 4 cafés, 7 informes, dos llamadas de teléfono de tu madre para recordarte no sé qué de una vecina, repasar la lista de la compra y 44 mensajes de whatsapp entre leídos y respondidos, decides aprovechar el rato "para ti" que te "regala la vida" con 45 mins de embotellamiento y subes el volumen de la radio para poder cantar a cualquier diva de la música como si te jugaras el puesto en la Academia. Y es en ese momento cuando la idea del libro va desinflándose cada vez más.
Admitirán ustedes, señoras mías, que muchas de nosotras al llegar a casa empezamos una segunda jornada laboral, sobre todo si hay Retoños de por medio. Y aunque mi Solete comparte las tareas domésticas al 50%, no sé cómo me las arreglo que al final siempre encuentro alguna cosa para hacer que no estaba prevista y termino perdiéndome el comienzo de las pelis. Así que para cuando finalmente me desplomo en el sofá lo único que tengo ganas de escribir es, NADA.
Y fue así como se creó el universo BLOG. Algo estupendo para cubrir casi todas las necesidades de un escritor en ciernes. Por un lado puedes sacar a pasear tu vena mas exhibicionista contando cualquier cosa que se te ocurra y de paso compartirlo con el resto del mundo... ya saben, cuántas más visitas haya al blog , mejor. Por otro, no te compromete a un mínimo de páginas, algo muy positivo ya que en mi caso, escribir un post-it según a que horas, me parece tan largo como escribir una trilogía histórica. Ni tampoco a unos tiempos de entrega, algo incluso más positivo que lo anterior, porque lo mío, aviso, no es la constancia.
¡Y encima se pueden subir fotos, dibujos, música, videos! Vamos, esto es "la purga de Benito"... ¡Es un todo en uno, es la noche de Viernes con el 1, 2, 3 y Mayra Gómez Kemp! (¡¡arriba Mayra!!)
Quizá por todo esto, o quizá porque jamás se me ocurrirá una historia a lo "Harry Potter", ni tan siquiera a lo "50 Sombras de Grey", he decidido empezar el nuevo año estrenando blog, que por otra parte, espero que llegue más lejos que mis propósitos para el 2014, pero esto señoras, será otra entrada...
Disfruten y compartan, seguro que también tienen sus propios motivos para haber empezado un blog.
No hay comentarios:
Publicar un comentario